Cómo conseguir el suelo de madera ideal

Arrancamos con la definición de lo que es una tarima de madera.

¿Por qué?
Pues porque, entre tantas denominaciones erróneas que existen, se necesita entender cuál es la terminología correcta… para poder escoger el suelo de madera adecuado.
Y para ello, nos vamos a olvidar de: tarima (a secas), tarima de madera (como término genérico), suelo flotante o parquet de madera. Ya que las únicas validas son: tarima tradiciónal (maciza) o tarima flotante (multicapa).

• Diferencias entre la tarima tradicional y la tarima flotante

TARIMA TRADICIONAL

Es la que se instalaba antiguamente en las viviendas y que ahora por su precio se pone muy puntualmente en viviendas de lujo.
Tienes que saber que es una tarima de madera en todo su cuerpo, maciza, mecanizada, alisada y con realización del machihembrado en el lateral de las tablas para su instalación engarzada entre ellas.
El grosor de estas tablas es de 18 hasta 28 mm. de espesor, siendo el más común el de 22 mm, lo que le da estabilidad a la tabla por su condición de natural. Razón por la que los largos varían al salir del aserradero, pudiendo ir desde 20 cm. hasta 3 metros de largo aproximadamente.
También, es importante mencionar las terminaciones de la superficie.
Hay fabricantes que venden la tarima ya tratada (barniz o aceite) y, simplemente, lista para instalar. Otra forma de suministrar es virgen (sin tratar) y, acuchillado y barnizado in situ, una vez instalada. Esta es la mejor opción, pues se queda la madera mas igualada y sellada de todas las juntas en su emplazamiento final.
La tarima de madera maciza permite un alto número de restauraciones. Se puede lijar varias veces a lo largo del tiempo, según su uso…y así, quedar completamente nueva.

TARIMA FLOTANTE

La llamada tarima flotante o multicapa es la más común de madera que se instala hoy en día, principalmente, por su coste respecto a la tradicional.
Es un suelo de madera, cuya característica es que el suelo de madera noble que pisamos tiene un grosor de 4mm, en el mejor de los casos, aunque puede llegar a 6 mm.
¿Pedidos especiales?
Por supuesto, que los hay de menos grosor, pero no es recomendable. Los largos suelen ser de 2 metros de largo, de media.
En cuanto a la estructura de una buena tarima flotante, esta se compone de una capa noble que es la que pisamos, otra intermedia encolada en sentido contrario y una tercera en la dirección de la noble que pisamos. Todas ellas deben ser de madera y suelen ser coníferas (pino / abeto).
Con esto se consigue una estabilidad con respecto a las condiciones de temperatura, calor / frio y agua, que hace que la madera, siendo ésta materia viva, se altere menos con estas condiciones.
En el 95% de las veces estas tarimas vienen terminadas de fabrica, barnizadas o aceitadas.
A la hora de restaurarlas, se pueden lijar y barnizar dependiendo del deterioro, al menos, 2 veces a lo largo de su vida útil.

• Define el estilo de la tarima que quieres

Determina cuáles son tus necesidades reales

Te recomendamos que primero valores el proyecto y determines cuáles son las necesidades reales del espacio. De esta forma podrás escoger siempre una tarima que se adapte a tus necesidades.

Cómo conseguir el suelo de madera ideal

Arrancamos con la definición de lo que es una tarima de madera.

¿Por qué?
Pues porque, entre tantas denominaciones erróneas que existen, se necesita entender cuál es la terminología correcta… para poder escoger el suelo de madera adecuado.
Y para ello, nos vamos a olvidar de: tarima (a secas), tarima de madera (como término genérico), suelo flotante o parquet de madera. Ya que las únicas validas son: tarima tradiciónal (maciza) o tarima flotante (multicapa).

— Diferencias entre la tarima tradicional y la tarima flotante

TARIMA TRADICIONAL

Es la que se instalaba antiguamente en las viviendas y que ahora por su precio se pone muy puntualmente en viviendas de lujo.
Tienes que saber que es una tarima de madera en todo su cuerpo, maciza, mecanizada, alisada y con realización del machihembrado en el lateral de las tablas para su instalación engarzada entre ellas.
El grosor de estas tablas es de 18 hasta 28 mm. de espesor, siendo el más común el de 22 mm, lo que le da estabilidad a la tabla por su condición de natural. Razón por la que los largos varían al salir del aserradero, pudiendo ir desde 20 cm. hasta 3 metros de largo aproximadamente.
También, es importante mencionar las terminaciones de la superficie.
Hay fabricantes que venden la tarima ya tratada (barniz o aceite) y, simplemente, lista para instalar. Otra forma de suministrar es virgen (sin tratar) y, acuchillado y barnizado in situ, una vez instalada. Esta es la mejor opción, pues se queda la madera mas igualada y sellada de todas las juntas en su emplazamiento final.
La tarima de madera maciza permite un alto número de restauraciones. Se puede lijar varias veces a lo largo del tiempo, según su uso…y así, quedar completamente nueva.

TARIMA FLOTANTE

La llamada tarima flotante o multicapa es la más común de madera que se instala hoy en día, principalmente, por su coste respecto a la tradicional.
Es un suelo de madera, cuya característica es que el suelo de madera noble que pisamos tiene un grosor de 4mm, en el mejor de los casos, aunque puede llegar a 6 mm.
¿Pedidos especiales?
Por supuesto, que los hay de menos grosor, pero no es recomendable. Los largos suelen ser de 2 metros de largo, de media.
En cuanto a la estructura de una buena tarima flotante, esta se compone de una capa noble que es la que pisamos, otra intermedia encolada en sentido contrario y una tercera en la dirección de la noble que pisamos. Todas ellas deben ser de madera y suelen ser coníferas (pino / abeto).
Con esto se consigue una estabilidad con respecto a las condiciones de temperatura, calor / frio y agua, que hace que la madera, siendo ésta materia viva, se altere menos con estas condiciones.
En el 95% de las veces estas tarimas vienen terminadas de fabrica, barnizadas o aceitadas.
A la hora de restaurarlas, se pueden lijar y barnizar dependiendo del deterioro, al menos, 2 veces a lo largo de su vida útil.

— Diferencias entre la tarima tradicional y la tarima flotante

TARIMA FLOTANTE

A la hora de restaurarlas, se pueden lijar y barnizar dependiendo del deterioro, al menos, 2 veces a lo largo de su vida útil.